“En tiempo de guerra hay quienes venden las balas y los que fabrican pañuelos”.
La crisis sanitaria nos cambió para siempre, cerramos operaciones en 2020 de marzo-abril y no podíamos parar porque eso significaba cerrar para siempre. Investigamos durante 15 días los procesos sanitarios para resguardar la salud del equipo y volvimos a operaciones con un nuevo producto que fué probado y aprobado para el uso humano para evitar el contagio de Covid-19. Fabricamos cubrebocas de grado sanitario y que adicional se diseñe personalizado para lucir genial. Nos salvó no solo la salud sino a la empresa y a quienes resultaron beneficiados del proceso de distribución como muchas personas que los vendieron para salir adelante.
Un producto que puede salvar vidas.
De vuelta a investigar materiales que cumplan con requerimientos sanitarios como de diseño e impresión nos llevó a verificar hasta la composición del material como del acabado para lograr un producto que fuese socialmente responsable de salvaguardar la integridad de las personas en una crisis de tamaño mundial fué el objetivo. Jamás actuar contra nuestros valores.
Las pruebas iniciales.
Grandes pasos se dieron con las pruebas de producto, tanto de eficiencia vs Covid-19 como de experiencia para los usuarios y aplicación de diseño para su comercialización
